1- No te sientas ofendido: la actitud de los demás no debe afectarte, lo que te ofende solo contribuye a debilitarte, si buscas ocasiones para sentirte ofendido las encontraras infinitamente. Ese es tu ego en plena acción, no puedes alcanzar la fuerza de la intención sintiéndote ofendido.
2- Libérate la necesidad de competir: Al ego le encanta dividir entre ganadores y perdedores. Tú no eres tus victorias.
3- Libérate de la necesidad de tener razón: El ego es fuente de conflictos porque te empuje a que los demás se equivoquen.
4- Libérate de la necesidad de ser superior: La verdadera nobleza no tiene nada que ver con ser mejor que los demás, se trata de ser mejor de lo que eras antes, céntrate en ti y en nadie más.
5- Libérate de la necesidad de tener más: el mantra del ego es más, por mucho que logres o tengas tu ego insistirá que no es suficiente. Cuando dejas de necesitar más mágicamente te llega más.
6- Libérate de la necesidad de identificarte con tus logros: Esto puede ser un poco difícil si crees que tú y tus logros son lo mismo. Cuando te apegas a esos logros crees que lo estas consiguiendo tu y solo te estas alejando de tu paz y la gratitud de tu fuente.
7- Libérate de tu fama: La fama que tienes no está localizada en ti, sino en la mente de los demás, si te preocupas demasiado por lo que piensen los demás te habrás desconectado de la fuente. Deja que otros discutan de tu fama no tiene que ver nada con tu persona
Recuerda lo que piensen de ti no es asunto tuyo.
Y POR ULTIMO DA AMOR, PORQUE DAR AMOR GENERA MAS AMOR.
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